Viajes con mi perro

Patones (Comunidad de Madrid)



De pronto, siento algo parecido a la euforia. En el mundo que habito en estos momentos no hay lugar para los problemas, todos mis amigos y conocidos estƔn sanos, EspaƱa no sufre la mayor sequƭa en muchos aƱos y, por supuesto, no cabe el desafƭo independentista.

De vez en cuando observo a Cooper por el espejo retrovisor quien duerme plĆ”cidamente en la parte de atrĆ”s del coche mientras circulo alegre por la AutovĆ­a A-1 decidida a seguir habitando en ese mundo durante unas horas, al menos durante el tiempo en que dure esta excursiĆ³n...tomo la salida del kilĆ³metro 50 en direcciĆ³n a Torrelaguna por la Nacional 320, atravieso esta localidad y enseguida llego a Patones por la M-102.



En realidad, a donde llego es a Patones de Abajo, situado a poca distancia de Patones de Arriba y aunque se puede acceder a esta Ćŗltima localidad en coche, yo prefiero dejarlo aparcado en el parking de Patones de Abajo y subir andando por la denominada Senda EcolĆ³gica del Barranco.

A travĆ©s de un sendero encajado en un barranco, la senda conecta los dos nĆŗcleos en que se divide Patones: Patones de Abajo fundado a mediados del siglo XX y Patones de Arriba cuyo origen se remonta al siglo XVI y cuyo casco antiguo fue declarado Bien de InterĆ©s Cultural en 1999. 

En esta garganta se pueden observar infraestructuras hidraĆŗlicas del Canal de Isabel II como el acueducto perteneciente al canal del Altazar ademĆ”s de la Cueva del Aire, una pequeƱa cavidad caliza habitada desde el NeolĆ­tico y que en la actualidad se utiliza para la prĆ”ctica de la espeleologĆ­a.


Aunque la senda solo mide 800 metros y tiene un suave desnivel asumible tanto para Cooper como para mĆ­, hace tanto calor que tengo la sensaciĆ³n de estar ascendiendo el Himalaya. El camino discurre paralelo al arroyo de Patones, pero hoy estĆ” seco: estamos a finales de octubre, pero tal parece que estemos en un dĆ­a caluroso de principios de verano, asĆ­ es que siento verdadero alivio cuando por fin llegamos al Ćŗltimo tramo.

Alivio y cierta desolaciĆ³n por la sequĆ­a, uno de los temas preocupantes de los que deseaba olvidarme en esta excursiĆ³n...Una desolaciĆ³n que comparto con una pareja que estĆ” paseando con su perro y que se muestran igual de preocupados que yo ante la visiĆ³n del arroyo seco y las altĆ­simas temperaturas para esta Ć©poca del aƱo.


Los Ćŗltimos metros de la senda ya discurren por la carretera que asciende a Patones. Desde ese punto ya diviso el casco urbano de Patones de Arriba, uno de los mejores ejemplos de la llamada arquitectura negra, asĆ­ denominada porque el material utilizado predominantemente es la pizarra lo que otorga ese color oscuro a las construcciones.


Al pueblo no se puede acceder en coche, hay una pequeƱa explanada para dejarlo a la entrada; supongo que esa prohibiciĆ³n no incluye a los residentes que no alcanzan segĆŗn me cuentan a las 10 personas. Hoy es un dĆ­a laborable y aunque hay algunos turistas, incluso una excursiĆ³n escolar, poco tiene que ver con la masificaciĆ³n que al parecer se produce en fin de semana, por eso supongo que la mejor opciĆ³n para esos dĆ­as es dejarlo como hice yo en el parking de Patones de Abajo y subir andando por la senda.

Se piensa que el origen de Patones de Arriba se remonta al siglo XVI a partir de un pueblo ganadero. Su principal actividad durante siglos fue la ganaderĆ­a y la agricultura, pero a mediados del siglo XX y a raĆ­z de la fundaciĆ³n de Patones de Abajo, fue prĆ”cticamente abandonado por la mayorĆ­a de sus vecinos que se asentaron en este Ćŗltimo municipio donde la vida era mĆ”s fĆ”cil. Hoy en dĆ­a la actividad es Ćŗnicamente hostelera y turĆ­stica lo que ha convertido a Patones de Arriba en un destino muy popular entre los madrileƱos.


A la entrada del pueblo se encuentra la antigua la Iglesia de San JosĆ©; en 1653 era una ermita y un siglo despuĆ©s se convertirĆ­a en iglesia, dejando de ser utilizada como tal tras el traslado de la poblaciĆ³n a Patones de Abajo. Hoy alberga el Centro de iniciativas educativas, turĆ­sticas, culturales y de ocio (Citeco), aunque conserva una pequeƱa capilla con una imagen de la Virgen de las Candelas. EstĆ” abierto sĆ”bados, domingos y festivos de 11 a 16 h.

Al lado de la puerta de entrada hay un panel con un itinerario que permite descubrir los lugares de mayor interƩs del pueblo. En total hay 10 atriles repartidos por el pueblo que describen las costumbres y la historia de Patones: Las eras de pizarra sobre las que se realizaba la trilla para recoger el grano, los hornos, el lavadero y la fuente nueva,...

Un dato histĆ³rico que me resultĆ³ muy curioso fue el de que Patones contĆ³ con un rey propio. El rey de Patones era en realidad una especie de juez de paz o alcalde, un anciano que administraba justicia entre los vecinos.


Deambulo sin rumbo fijo descubriendo los rincones menos transitados...




...sorprende la cantidad de oferta gastronĆ³mica para un pueblo tan pequeƱo...todo son bares y restaurantes...


Entre todos ellos elijo uno con una terraza muy agradable, el Bar El BodegĆ³n, donde me sirven unas deliciosas croquetas de setas y un yogur con frutos del bosque.


La camarera que me atiende es muy amable y se ofrece a quedarse con Cooper mientras voy al baƱo. Al final se queda al cuidado de una pareja tambiƩn muy amable que estƔ comiendo en la mesa de al lado. Me cuentan que no han traƭdo a sus dos perros porque les habƭan advertido que en el pueblo hay muchos gatos, con los que al parecer no se llevan muy bien...


Tras el cafĆ© doy un Ćŗltimo paseo por el pueblo...A pesar del calor mĆ”s propio de Ć©pocas estivales, todo la mayor parte de la vegetaciĆ³n del pueblo luce unos hermosos colores rojizos propios del otoƱo, en parte debido a una enredaderas que creo son ampelopsis, aunque no estoy segura, y que hay en abundancia por toda la localidad...



En mi deambular llego a una zona donde pasa la Senda del Genaro. Esta senda de 70 kilĆ³metros es la de mayor longitud de las pertenecientes a la Red de Sendas Verdes de Madrid. La senda rodea el Embalse de Altazar y consta de 7 etapas. La que parte de Patones de Arriba es la 2, de dificultad alta y  de 15,6 kilĆ³metros.


HabĆ­a leĆ­do en una guĆ­a que hay otros sitios de interĆ©s por la zona ademĆ”s del propio Embalse de Altazar (el mayor embalse de la comunidad donde hay varias Ć”reas recreativas) como el Conjunto ArqueolĆ³gico de la Dehesa de la Oliva.
(Para llegar hasta este Ćŗltimo lugar hay que bajar a Patones de Abajo, pasado este municipio a 4,5 kilĆ³metros hay que girar a la izquierda por la M- 134 en direcciĆ³n a el Altazar. A mano derecha y a unos dos kilĆ³metros hay un camino forestal que conduce al cerro donde se encuentra el yacimiento caminando unos 15 minutos)

Pero decido dejar esa visita quizĆ”s para otra ocasiĆ³n... Cuando un poco despuĆ©s estoy iniciando el descenso por la Senda EcolĆ³gica del Barranco hasta Patones de Abajo, para recoger el coche y regresar a Madrid, me entra un whatsapp en el que se me informa que que el presidente de la Generalidad, Puigdemont, va a convocar elecciones y unos minutos mĆ”s tarde otro del mismo informante en el que me cuenta que el polĆ­tico ha cambiado de opiniĆ³n y que ahora ya no las convoca...Decido seguir mi camino firme en mi propĆ³sito de olvidarme de la actualidad aunque sĆ³lo sea durante las horas que dura mi excursiĆ³n, asĆ­ es que no consulto las noticias en internet y continĆŗo el descenso hacia el parking...

Palacio de Arteaga, realizado en piedra caliza sus orĆ­genes se remontan a los siglos XVII y XVIII. Esta casa palacio perteneciĆ³ a la familia Arteaga hasta que en 1853 fue adquirida por el Canal de Isabel II.
Unos minutos despuĆ©s estoy conduciendo hacia Madrid, pero cuando llego a la altura de Torrelaguna decido hacer una parada movida por un inexplicable impulso que me hace intuir que Torrelaguna tiene algĆŗn bello secreto que ofrecerme... Aparco el coche en la Calle La Cava muy cerca del Palacio de Arteaga y desde ahĆ­ camino hasta la Plaza del MontalbĆ”n donde se encuentra el Palacio de Salinas.

Realizado en el siglo XVI por el taller de Gil de HontaĆ±Ć³n, del Palacio de Salinas solo se conserva la fachada del edificio original de estilo renacentista, pues el resto fue destruido durante la Guerra Civil; en la actualidad alberga la casa-cuartel del la Guardia Civil.


Paso un rato sentada a la sombra de un Ć”rbol frente a la fachada del palacio y me siento tan a gusto que no puedo menos que felicitarme por haber sucumbido al impulso de detenerme en Torrelaguna declarada Conjunto HistĆ³rico ArtĆ­stico en 1974. A unos metros de donde estoy se encuentra la estatua del Cardenal Cisneros que naciĆ³ en Torrelaguna en 1436, algo que desconocĆ­a por completo, y cuyas contribuciones a su villa natal fueron numerosas.

Estatua del Cardenal Cisneros, confesor real, Arzobispo de Toledo, Inquisidor General de Castilla y regente de EspaƱa a la muerte del Rey Fernando.
Pero las sorpresas no acaban ahĆ­ porque cuando accedo por la Calle de las Monjas a la Plaza Mayor me pregunto como es posible que nunca haya oĆ­do hablar de Torrelaguna, una poblaciĆ³n situada a tan solo 67 kilĆ³metros de Madrid y que cuenta con esta plaza mayor presidida por una iglesia tan bonita como la que ahora tengo ante mis ojos, la Iglesia de Santa MarĆ­a la Magdelena . La iglesia considerada como uno de los mejores ejemplos de la arquitectura gĆ³tica madrileƱa, cuenta en su decoraciĆ³n con elementos gĆ³ticos y renacentistas.

La Iglesia de Santa Marƭa Magdalena declarada Bien de InterƩs Cultural.
En la plaza se encuentra tambiĆ©n La AbadĆ­a de Concepcionistas Franciscanas Descalzas. Fue fundada en 1560 y reconstruida en 1960. El Ćŗnico elemento original que pudo reconstruirse es la entrada de la capilla en cuyo interior se encuentra el sepulcro de sus fundadores Hernando Bernaldo de QuirĆ³s y su esposa Guiomar de Berzosa. 


Y por supuesto, el Ayuntamiento, fundado por el Cardenal Cisneros en 1514 para servir como pĆ³sito (almacĆ©n de grano principalmente trigo para prestar a los agricultores durante los meses de escasez).


La plaza estĆ” vacĆ­a cuando llego. Todo es paz y silencio a esas horas...silencio solo roto por el sonido de la televisiĆ³n del Ćŗnico bar que hay abierto y que, como no, estĆ” dando noticias sobre CataluƱa....unos metros mĆ”s allĆ” me encuentro que un repartidor que estĆ” dormitando en su furgoneta de reparto tiene encendida la radio en la que tambiĆ©n, por supuesto, estĆ”n dando noticias sobre CataluƱa.



La iglesia estĆ” cerrada pero la Oficina de InformaciĆ³n y Turismo que se encuentra en el nĆŗmero 8 de la Plaza Mayor si estĆ” abierta; la chica que me atiende, muy amable y simpĆ”tica, me cuenta que la iglesia se abre los fines de semana y festivos, tambiĆ©n en dĆ­as laborables para visitas de grupos. Me cuenta tambiĆ©n que La Puerta del Cristo de Burgos es la Ćŗnica que se mantiene en pie de todas las del recinto amurallado y que muy cerca de la Plaza Mayor se encuentra un edificio levantado en los siglos XIV y XV como AlhĆ³ndiga o Mercado de Abastos.

 EspadaƱa (campanario formado por una sola pared en la que estĆ”n abiertos los huecos para colocar las campanas) del Monasterio Franciscano fundado por el Cardenal Cisneros y destruido por las tropas francesas durante la Guerra de la Independencia. La espadaƱa es la original.
Le comento que me gustarĆ­a volver a Torrelaguna para visitar el interior de la iglesia y me responde que cuando regrese tengo que aprovechar para hacer una ruta de senderismo por el PontĆ³n de la Oliva pues merece realmente la pena. SegĆŗn me cuenta, la ruta es de dificultad fĆ”cil y parte de la Presa del PontĆ³n de la Oliva (la mĆ”s antigua de toda la comunidad, aunque dejĆ³ de funcionar en 1904, y que parece ser es muy frecuentada por escaladores) para terminar en la Presa de la Parra; su longitud es de algo mĆ”s de 7 kilĆ³metros, solo de ida.
El Ćŗnico problema para mĆ­ que tengo tendencia al vĆ©rtigo es que, al parecer, el recorrido comienza con un estrecho camino que discurre entre una pared de piedra y una barandilla, para al final de la misma encontrarse con el comienzo de la ruta propiamente dicha tomando el camino que sale a la derecha de una bifurcaciĆ³n. Por eso, quizĆ”s, decido dejar esta senda para otro dĆ­a...una lĆ”stima pues el camino discurre al lado del RĆ­o Lozoya algo que, sin duda, harĆ­a feliz a Cooper que adora baƱarse.


AsĆ­ es que vuelvo a recorrer la Calle de las Monjas para acercarme a recoger el coche en la Calle La Cava; ya en el interior pongo la radio y descubro que todos las emisoras estĆ”n retransmitiendo un discurso de Puigdemont: ¡Me rindo!! le digo a Cooper que, naturalmente no me entiende, aprieto el acelerador y, poco tiempo despuĆ©s, llegamos a Madrid.


Aceptan perros en Patones de Arriba:              

Casa Rural La Leyenda de Patones
TelƩfono: 910 61 62 70

Bar el BodegĆ³n(en la terraza)

Restaurante Las Heras
TelƩfono 918 43 21 26


Aceptan perros en Torrelaguna:

Apartamentos ZaguƔn de la Villa.
http://zaguandelavilla.com/web/


































3 comentarios

  1. Wow es muy hermoso todo por allƔ de verdad me han encantado las fotos que te has tomado con tu perro, que tambiƩn es una belleza jeje.

    A mi me gustarĆ­a viajar a conocer animales de la saban debido a que me llaman mucho la atenciĆ³n, pero no creo poder llevar mi perro para ese viaje debido a que sufrirĆ­a mucho :l

    Pero me gustarĆ­a conocer animales como los que se muestran aquĆ­ https://animalesis.com/sabana/ debido a que me parecen muy interesantes

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  2. Muy bueno! Me ha encantado una vez mƔs esta entrada...como todas las que he leƭdo.. y siempre con ganas de viajar a esos lugares tan bien descritos..
    Me encanta el ¡Me rindo! Jajaja

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